El cuerpo humano es maquina perfecta que tiene un mecanismo de defensa que jamas has imaginado. 
Sabes el porque del...

1.      El bostezo
Qué placentero es, a veces, bostezar a la mañana en el trabajo. Pero ¿por qué bostezamos? Hoy en día el mecanismo de bostezo es uno de los menos estudiados. Sin embargo, los científicos llegaron a ciertas conclusiones sobre este tema tan curioso. Una de las principales razones del bostezo es el aumento de temperatura cerebral, así como la sobrecarga de la actividad cerebral. Si trabajamos en exceso, dormimos poco o sufrimos de insomnio, el organismo experimenta estrés psicológico, ante el cual el cuerpo pone en marcha un particular mecanismo de defensa. La inhalación de una significativa cantidad de aire durante el bostezo permite que la temperatura del cerebro disminuya a través de la parte superior del paladar, se dilatan las vías respiratorias, lo que aumenta la cantidad de oxígeno en la sangre y de esta manera relaja los músculos. En general, el bostezo es muy útil y sano para nuestro organismo.

 

2.      El estornudo
El mecanismo del estornudo se activa cuando en la mucosa de la cavidad nasal se acumulan alérgenos, bacterias, polvo o si usted condimentó su comida con demasiada pimienta negra molida. En cualquiera de estas situaciones, las terminaciones nerviosas de dicha mucosa se irritan y la persona estornuda, para tratar de eliminar todo el exceso de sustancias extrañas que tenía en la nariz y garganta. Lo más importante es que no haya nadie delante de usted en ese momento, sería una situación un poco incómoda, ya que la velocidad del aire exhalado a través del estornudo alcanza los 160 kilómetros por hora, y un sólo estornudo en promedio puede contener más de 100 mil de bacterias patógenas. En otras palabras, trate de taparse la nariz con un pañuelo mientras estornuda, o por lo menos con la palma de la mano. De esta manera se reduce la propagación de dichas bacterias. Si una persona estornuda de forma continua durante un largo periodo de tiempo puede ser una manera de aviso del organismo de que cerca se encuentra un fuerte alérgeno. Por cierto, ¿sabía que algunas personas son alérgicas a la luz solar? Imagínese: un hombre se despertó por la mañana y comenzó a estornudar hasta el atardecer. Lo bueno es que casos como éste, no son muy frecuentes.

3.      Elongación
La elongación  es también una especie de mecanismo de defensa, a pesar de que casi siempre lo hacemos en forma voluntaria. Sin embargo, este proceso es muy importante para el funcionamiento normal de nuestro cuerpo. Durante la elongación y el estiramiento, en especial por la mañana, el cuerpo se prepara para las actividades físicas que lo esperan durante el día. Aumenta la circulación sanguínea, y consecuentemente se incrementa la temperatura en los músculos, así como también mejora el estado de ánimo. Los científicos afirman que incluso mejora el sentido del gusto y tacto. Como conclusión, antes del desayuno realice estiramiento y elongación.

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4.      El hipo
El hipo es un tipo de señal del organismo de que algo no está del todo bien con nuestro sistema digestivo. Por supuesto que puede haber hipo sin que esto sea una señal de alguna patología. Pero lo más frecuente es que sea una manera de comunicarnos que es hora de parar de comer. Cuando una persona come apresuradamente, no mastica bien y traga grandes trozos de comida o cuando come en exceso, se irrita el nervio vago, que está estrechamente relacionado con el estómago y el diafragma. Existe un límite para todo, incluyendo la comida. Hoy en día no existe un medio para combatir el hipo. Algunas personas, retienen la respiración, otras toman un vaso de agua y hay otras a las que nada les ayuda. Simplemente esperan con paciencia a que pase solo.

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5.      Las crisis mioclónicas
Seguramente le es conocida esa sensación, cuando está acostado en la cama, empieza a caer en un profundo y agradable sueño y de pronto siente una sensación de shock eléctrico en todo su cuerpo. Todos los músculos se contraen de una manera muy brusca, la persona se despierta inmediatamente y no comprende qué es lo que realmente pasó. Este fenómeno también es parte de los mecanismos de protección de nuestro organismo y se lo denomina "crisis mioclónica". Lo que ocurre es que cuando se entra en la etapa del sueño profundo, la frecuencia respiratoria disminuye, el pulso es ligeramente más lento y los músculos se relajan. El cerebro interpreta este estado como amenaza de muerte. Es por eso que envía un fuerte impulso eléctrico, con el fin de salvar el organismo. Se podría decir que el cerebro está tratando de revivir, poniendo en marcha un electroshock interno del cuerpo. Por supuesto, cuando llega la señal de que la amenaza de muerte era sólo una falsa alarma, el cerebro se calma y le permite dormir normalmente. Pero hay que admitir que es agradable saber que él está constantemente pendiente de nuestra vida.

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